El video de un choque a toda velocidad y el milagro que salvó a la conductora: el rol clave de la piscina


Los cuatro minutos del video que quedaron registrados en las cámaras de videovigilancia de una casa en Nevada, Estados Unidos, podrían resumirse con el dicho popular: “No era su día”.

Sucedió en Laughlin, cuando faltaban dos minutos para las once de la noche. La tranquilidad del patio trasero de una propiedad se convirtió en la escena de un choque a toda velocidad en cuestión de cinco segundos.

El plano muestra una piscina y un paredón de ladrillos en medio de la quietud de la noche. De pronto, aparece de la nada un auto blanco que se estrella contra el muro, rompe varios bloques de cemento a su paso y enseguida gira por el aire como un trombo.

Luego el vehículo impacta contra un techo de chapa que funcionaba como quincho, y finalmente cae visiblemente dañado al suelo, donde rebota hasta detenerse.

Si se reproduce en cámara lenta el clip se puede apreciar el impactante momento en que mientras el coche estaba suspendido en el aire sin control, justo antes de chocar contra el techo, la conductora salió despedida y cayó justo en la pileta.

La secuencia continúa con todos los ladrillos flotando, y dos minutos después de que se calmara el movimiento del agua, se vislumbra a la mujer que manejaba el vehículo, recostada y aparentemente inconsciente en la parte menos profunda de la piscina.

El testimonio del dueño de la casa: “Estuve a punto de meterme al agua minutos antes del choque”

Las imágenes, que datan del 15 de diciembre de 2025, fueron difundidas por el noticiero FOX 5 Las Vegas. El dueño de la propiedad, Cletis Reed, habló con el medio y contó qué pasó y cómo lograron rescatar a la joven.

“Escuché un estallido aterrador, como si un tren se hubiera descarrillado, y pensé que algo había pasado en la calle, así que salí y vi que todo mi patio trasero estaba destruido“, reveló Reed.

En shock por lo ocurrido, confesó que estuvo a punto de entrar a su jacuzzi, ubicado cerca de la pared que se derrumbó en el accidente.

“Levanté la tapa, metí mis piernas en el agua y recordé que necesitaba decirle algo a mi esposa. Gracias eso estoy aquí, porque si hubiera estado en el jacuzzi, habría muerto“, aseguró.

“Todo volaba por los aires y de pronto una mujer flotaba en mi piscina, boca arriba, se daba vuelta boca abajo y oía sus gemidos”, relató.

Al verla se metió al agua y logró sacarla del agua junto a otro vecino. La mujer parecía en estado de ebriedad, y luego se confirmó que tenía registros previos de multas de tránsito y accidentes.

“Estaba consciente, pero desorientada, y afortunadamente unos 15 minutos después del impacto logró reaccionar, pudo ponerse de pie y fue entrevistada por la policía”, indicó.

Luego la mujer fue trasladada a un hospital en Arizona para una revisión completa de su estado de salud, donde se confirmó que solo sufrió heridas leves.

El vehículo quedó en una posición de tan difícil acceso que una grúa tuvo que asistir la situación para poder extraerla del patio.

El agua de la piscina quedó contaminada con 25.000 galones de aceite de motor, y deberá ser vaciada por completo para limpiar los restos de combustible.

Reed estima que las reparaciones de la propiedad podrían costar casi 300.000 dólares, y contó que había invertido todos sus ahorros de la jubilación para construir ese oasis en su patio trasero.

“Me dedicó toda la vida al rubro de la construcción, así que elegí esta piscina estilo resort para pasar bien mis últimos años, pero nada importa ahora, porque fui bendecido para vivir un poco más y esa mujer también”, manifestó.

“Realmente no puedo dormir bien porque lo sigo pensando una y otra vez. Si una sola cosa hubiese sido diferente, habría sido una tragedia”, concluyó Reed.



Fuente: www.clarin.com

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